Incluso un reloj roto da la hora correcta dos veces al día, dice el adagio. Pero un sistema de control de iluminación roto o desincronizado puede significar un desastre durante días y días.
En muchos sistemas de control de iluminación, un controlador central o concentrador dicta los horarios para todos los componentes conectados. Los instaladores configuran la hora en el controlador principal y luego ese único controlador comunica la hora (y el horario) a todos los demás dispositivos dentro del sistema.
Piense en esto como un director de música que actúa como cronometrador de un grupo de músicos dentro de una orquesta. Si está haciendo bien su trabajo, el conjunto mantiene el ritmo y hace una música hermosa.
Pero, ¿qué sucede si el director se pierde en la partitura? O peor aún, ¿y si deja el escenario por completo?
Los músicos individuales, o los componentes individuales del sistema de control de iluminación, deben valerse por sí mismos y el ritmo se desincroniza.
En el mundo real, un controlador central o concentrador puede fallar debido a un corte de energía, una falla de un componente individual, un reinicio a una red de área local o cualquier número de razones impredecibles.
Cuando ocurre una falla en un sistema centralizado, los horarios de ENCENDIDO/APAGADO pueden cambiarse y las configuraciones importantes pueden restablecerse. Esto deja a los administradores de las instalaciones con la desagradable tarea de reprogramar dispositivos y solucionar problemas en todo el sistema.
El director contra el metrónomo
El sistema de control de iluminación avanzado ARISTA® resuelve este dilema integrando un chip de reloj en tiempo real (RTC) en sus controladores. Una vez que se instala e incorpora un controlador a través de la aplicación móvil ARISTA, sincroniza automáticamente los horarios con los otros dispositivos del sistema.
Piense en los controladores ARISTA como un grupo de metrónomos, todos los cuales siguen el mismo punto de referencia para el tiempo. Un metrónomo es una herramienta que utilizan los músicos para practicar tocar a un tempo o ritmo específico.
A diferencia de nuestros músicos sin director, cada metrónomo (o dispositivo ARISTA) puede mantener el ritmo, independientemente de quién más esté tocando o dirigiendo el conjunto.
En el improbable caso de que un dispositivo ARISTA falle, la comunicación entre los dispositivos restantes garantiza que todos los horarios permanezcan sincronizados. Esto es posible gracias al RTC incorporado.
Un reloj de tiempo confiable no solo ayuda a evitar problemas de mantenimiento molestos, sino que también permite a los usuarios crear horarios utilizando la función astronómica de ARISTA.
La programación astronómica utiliza la latitud y la época del año aproximadas para reflejar las horas naturales de la puesta y la salida del sol del lugar donde esté instalado el sistema ARISTA. Esto significa que un usuario puede programar con confianza las luces para que se ENCIENDAN al anochecer cuando la luz ambiental disminuye y se APAGUEN a las 8 p. m. una vez que el negocio cierra, por ejemplo.
Al combinar la programación del tiempo, la detección de ocupación y la detección de luz con la continuidad de un reloj en tiempo real, ARISTA ayuda a maximizar la eficiencia energética y la comodidad de los ocupantes a largo plazo.
¿Está en el proceso de elegir un sistema de control de iluminación comercial? Lea nuestro informe técnico reciente, Las ventajas de un sistema de control de iluminación de malla Bluetooth® basado en habitaciones para saber cómo el diseño único de ARISTA ofrece un rendimiento duradero y características amigables para los contratistas.